Charles Leclerc fue el más rápido de la mañana con un 1:31.750 y Carlos Sainz rebajó ese tiempo hasta el 1:29.921, que le permitió liderar con bastante tranquilidad la segunda jornada de test de pretemporada 2024 en Bahrein, quizá en una respuesta al dominio de Max Verstappen en la primera jornada de pruebas.

Un holandés que por cierto no corrió este jueves, ya que fue Sergio Pérez quien pilotó el RB20 durante todo el día, con un 1:30.679 que le permitió acabar segundo, a 0.758s del español de Ferrari. Aunque en cuanto a kilometraje fue el más destacado, con 129 vueltas, con Lewis Hamilton muy cerca, ya que completó 123 giros y acabó tercero con un 1:31.066.

El mexicano, al contrario que Verstappen ayer, se llevó varios sustos, primero con un problema de frenos y más tarde con una avería "sin importancia" en su motor que casi le deja tirado en la pista. Además, una bandera roja en sesión matinal por una alcantarilla, dañó el Ferrari SF-24 y cambió la duración de ambas sesiones, con una tarde en la que hubo hasta cinco horas de acción.

Lando Norris acabó cuarto con su McLaren, por delante aunque por poco de Daniel Ricciardo y Charles Leclerc, quien sólo pilotó por la mañana. Lance Stroll fue el primero de los Aston Martin, aunque se quedó a 2 segundos de Sainz, mientras que Fernando Alonso realizó mucho trabajo aerodinámico durante la mañana y por la tarde cedió su asiento al canadiense, sin centrarse prácticamente nada en los tiempos.

Los Sauber y los Alpine dejaron algunas dudas, aunque por momento fueron rápidos, mientras que Williams y sobre todo Haas F1 Team parece que siguen muy atrás, aunque quizá sólo se deba a unos programas de pruebas diferentes a los de sus rivales.

El segundo día de test empezó con bastante actividad en pista y muchas pruebas por hacer en todos los equipos. Después de algunas vueltas de adaptación y de llevar acabo diferentes comprobaciones, Charles Leclerc sorprendió a todos con 1:31.750 con neumáticos C3.

Peor fortuna sufrió Sergio Pérez, que en su estreno en esta pretemporada vio como un problema en los frenos le hacía perder mucho tiempo en pista. Para Fernando Alonso fue una mañana de pruebas aerodinámicas y tuvo unas horas relativamente tranquilas, al igual de Lewis Hamilton.

Sin embargo, todo voló por los aires cuando Leclerc levantó una alcantarilla en la curva 11 que el británico de Mercedes acabaría de desencajar, provocando una bandera roja que acabó con la sesión matinal una hora antes de lo previsto. Sin embargo, para que los pilotos no perdiesen tiempo en pista, la FIA aumentó la duración de la sesión vespertina en una hora.

Ya por la tarde, algunos pilotos como Leclerc hicieron acto de presencia de nuevo para recuperar el tiempo perdido y comprobar que su monoplaza estaba bien tras haberlo dañado en uno de sus pasos por encima de la problemática alcantarilla.

Otros equipos, como fue el caso de McLaren, cambiaron de piloto y fue Lando Norris quien salió a rodar con el MCL36, mientras Oscar Piastri se quedaba ya descansando. Aston Martin también siguió el mismo plan y Alonso acabó su trabajo con 31 vueltas y un mejor crono de 1:33.053.

La primera hora de la tarde fue muy ajetreada, en gran parte porque los equipos habían tenido tiempo para realizar cambios en sus monoplazas y querían recoger los datos que no habían podido recoger en la sesión de la mañana. Durante esos minutos, casi ningún piloto pudo ascender posiciones en la parrilla y Logan Sargeant estuvo muy cerca de trompear.

Un poco más tarde, a excepción de Mercedes, Williams y Red Bull, los equipos que todavía no habían cambiado de pilotos, procedieron a ello, como fue el caso de Ferrari, que dio entrada a Carlos Sainz, que ya en sus primeros vueltas empezó a marcar tiempos muy rápidos y no tardó en superar el crono de su compañero de equipo por la mañana.

El piloto español llegó a bajar el crono hasta el 1:29.921, un registro que sorprendió a todo el mundo, ya estaba a sólo dos décimas de la pole position de la temporada pasada en el GP de Bahrein y nadie se conseguía bajar su diferencia respecto al SF-24 por debajo de un segundo, Hamilton sufrió un susto en el intento y Norris se quedó a 1.3 segundos en la segunda plaza.

Sergio Pérez, por su parte, que ya rodaba con normalidad tras su problema de frenos, volvió a sufrir un susto cuando tuvo que llegar a boxes con la primera marcha engranada y casi parado. Sin embargo, poco después pudo volver a salir a rodar y eso evidenció que no eran problemas demasiado graves para el Red Bull RB20.

Ya entrados en la última hora de sesión vespertina y después de muchas simulaciones de carrera, Lewis Hamilton montó el C3 para marcar un 1:31.066 y colocarse a 1.1 segundos de Sainz (que hizo su tiempo con el C4), mientras que Daniel Ricciardo con el RB se ponía también a 1.4s. Bastante más atrás, Stroll no bajaba del 1:32 y se quedaba a 2.1s del madrileño de Ferrari.

Uno de los últimos pilotos en mejorar su tiempo, también con el C3, fue Checo Pérez, que fue el primer piloto en entrar en la barrera del segundo de diferencia respecto a Sainz gracias a su 1:30.679, un crono que le dejó segundo, a 0.758 del crono más rápido del jueves.

En cuanto a vueltas, obviamente Pérez (129), Hamilton (123) y Sargeant (117) fueron los que más rodaron, ya que no compartieron la sesión con sus respectivos compañeros de equipo.