Pecco Bagnaia y Jorge Martín parecen predestinados a jugarse el Mundial de MotoGP en un intercambio de golpes hasta final de curso, que en el asalto del circuito de Buddh se llevó el español. Los dos se enzarzaron en un toma y daca cuando peleaban por la segunda plaza que terminó con el actual campeón rodando por el suelo, a ocho vueltas para el final y completamente solo.

A pesar de ver a su rival fuera de combate, el #89 no pudo relajarse em ningún momento. Primero se le abrió el mono a falta de cinco giros, una eventualidad que le obligó a ralentizar para subirse la cremallera, quedando a merced de Fabio Quartararo. El Diablo, en su mejor versión, a punto estuvo de darle un disgusto a ‘Martinator’, que finalmente pudo defender un resultado inmejorable a pesar de irse largo en la última vuelta, presa del agotamiento.

Con este resultado, el madrileño le pega un bocado al margen a favor de Bagnaia al frente de la tabla general, reducido ahora a solo 13 puntos.

Quartararo, muy afilado ya desde el sábado y que no quiso forzar más de la cuenta y arriesgarse a tirar a Martín, sumó su segundo podio de la temporada tras el que logró en Austin.

El cuarto puesto fue para Brad Binder, a pesar de los achuchones de Joan Mir (quinto), en su mejor fin de semana como piloto de Honda. Johann Zarco finalizó el sexto, por delante de Franco Morbidelli (séptimo), que completó un gran premio más que aceptable para Yamaha.

Maverick Viñales, que se quedó casi clavado en la arrancada, concluyó el octavo, a dos segundos por delante de Marc Márquez, que sufrió una caída en el sexto giro y mientras circulaba el cuarto. El corredor de Cervera (Lleida) no dejó ir en ningún momento a su prototipo y se reincorporó, para culebrear entre sus rivales hasta meterse dentro de un top 10 que cerró Raúl Fernández.

Al margen de Bagnaia, Aleix Espargaró fue otro de los que no pudo terminar, en el caso del piloto de Granollers (Barcelona) por una avería en su Aprilia.